




El clima de la Ribera del Duero se caracteriza por tener veranos secos y calurosos
e inviernos largos y rigurosos, con intensas heladas y pluviometría media-baja.
Las acusadas oscilaciones térmicas entre estaciones y sobre todo, el fuerte salto
térmico entre el día y la noche en tiempo de maduración, favorecen la alta
concentración de polifenoles que caracteriza los vinos de esta D.O.
Este clima extremo, unido a la elevada
altitud y los suelos calizos dan lugar a uvas de excelente calidad que permiten
la elaboración de los vinos de gran cuerpo y color propios de la Ribera del Duero.

En Bodegas Pagos de Mogar realizamos un estricto control de la producción de uva.
El cultivo se realiza de forma que el vigor de las cepas sea moderado, y las
labores en verde y el aclareo de racimos son llevadas a cabo en caso necesario,
resultando rendimientos que no superan los 5.000 kg por Ha.
Nuestros vinos son monovarietales,
elaborados con un 100% de uva Tinta del País. Esta variedad, la expresión local
del tempranillo, es utilizada mayoritariamente en la Ribera del Duero y ha demostrado
en esta región su gran potencial para la elaboración de vinos de crianza. |